Beatriz, Aarón ¿Cómo es ese primer contacto con este deporte? 

A.R: Con once años empecé a coger olas. A los quince ya me pasé a la tabla y a los veinte ya supe que era a lo que me quería dedicar. Comenzaron los viajes en busca de la ola perfecta. Se convirtió en una obsesión hasta el punto de convertirme en Shaper, para poder diseñar mis propias tablas y adaptarlas a esas olas que yo iba buscando.

B.G: Con trece años aproximadamente. Mi primo cogía olas y tenía una caseta en Los Guirres. Ahí tuve mi primer contacto con el boogie. Cuando regresé a Lanzarote, donde me críe, me empezó el gusanillo de probar la tabla y me animé asistir a los cursos que impartían en Famara para aprender a surfear.

Una pregunta que sólo un surfista puede responder, ¿qué se siente sobre una ola?

A.R:  Es un poco difícil de explicar, pero desconecto. Es mi forma de volar y cada ola para mí es como una recarga de energía que necesito casi a diario. Es mi enchufe, por eso me gustan tanto las big waves, porque siento esa energía en movimiento que me envuelve y es como si me electrocutara. Surfear es una sensación, hay que experimentarlo.

B.G: Coincido con Aaron, no hay palabras para describir todo lo que puedes llegar a sentir cuando te deslizas sobre una ola. No puedes pensar, quizás eso sea lo mejor que tenga, que es uno de los momentos que te hacen entrar en otra dimensión y nada más a tu alrededor importa. Cero problemas, cero preocupaciones… indescriptible y mágico al mismo tiempo. 

¿Cómo surge esta novedosa iniciativa, el fusionar cine y surf en una isla como La Palma? 

A.R: Bea hace tiempo que quería hacer algo relacionado con el tema y me lo propuso. Me pareció una buena idea porque ya conocía su línea audiovisual y a pesar de no tener nada que ver con la típica línea que se sigue en este tipo de pelis, me gustaba porque sabía trasmitir sensaciones. Lo habitual en este género es que sea todo más documental, mucha acción de por medio, que al final siempre es más de lo mismo y dejan otro tipo de emociones que también existen fuera.

B.G: Hace años que me dedico al audiovisual y quería hacer algo relacionado con este deporte. Ya lo había hablado con Aarón, pero por falta de tiempo, lo habíamos dejado aparcado hasta que este año por fin, con poco margen de entrega todo sea dicho, decidimos aventurarnos y sacar adelante esta humilde producción que tanto a él como a mí nos ilusiona mucho.

Hablemos de esta producción, “THE SHAPER”. Sabemos que Aaron se dedica profesionalmente al diseño de tablas, ¿guarda algún tipo de relación con el personaje?

A.R: Fue una grata sorpresa que escogiera ese título, la verdad.  Es cierto que el protagonista se dedica a shapear tablas, esa es una de las similitudes que tiene conmigo, así como alguna otra, pero no es mi historia personal. Es otra completamente ideada para esta producción.

B.G: Ciertamente, esto es una historia de ficción pero con algo de realidad detrás. El protagonista es shaper en la vida real y en la peli también, pero no es un documental en el que se hable de la vida de Aarón, es un historia emotiva que refleja otro tipo de valores que se han ido perdiendo en este tipo de películas. 

¿Qué dirían que tiene esta película, que no tiene otra de este género?

A.R: Sentimientos y valores que perduran con el paso del tiempo. Tiene una parte de acción como todas las de este género, pero no prima sobre todas las cosas. Es una historia bonita que trasmite y que te hace reflexionar.

B.G: Tiene algo que tuvimos claro desde el principio. Nuestro sello personal. Los dos conocemos este deporte, tenemos experiencia en el cine también, pero sobre todas las cosas, hay algo que nos caracteriza, nos gusta superarnos y tenemos esa sensibilidad que el agua del Océano nos ha  aportado. Hemos fusionado lo mejor de nosotros mismos y eso no se encuentra en otro tipo de cine de surf.

CSFF (Canarias Surf Film Festival) es un festival internacional de cine de surf que exige un nivel importante a la hora de seleccionar las películas, ¿Cómo se sienten estando dentro de esta selección audiovisual?

A.R: Es todo un lujo estar entre los seleccionados, puesto que es un festival en el que tienes que pasar muchos filtros y se exige muchísimo a nivel audiovisual. Que esta peli esté proyectada al lado de grandes producciones es un orgullo.

B.G: Esto fue un poco echarlo a suertes. Con el tiempo justo, con el presupuesto justísimo y pocas probabilidades de estar dentro, pero eso sí, como mucha ilusión puesta en ello y lo más importante, satisfechos con el resultado.

Desde el punto de vista de cada uno, como directora del film y actor del mismo, ¿Qué buscan trasmitir con esta creación audiovisual?

A.R: Como personaje, trasmito algo que también me caracteriza a mí como persona que es ese afán por superarme cada día un poquito más y ser capaz de derrotar esos miedos que en ocasiones, intentan superarnos en la vida.

B.G: Quiero trasmitir valores y sentimientos. Esto no es la típica película de surf que ofrece pura acción y adrenalina, es una historia que esta relacionada con un deporte que además es cultura y, que hemos querido que sea diferente por los motivos que se han expuesto anteriormente.

Para finalizar esta entrevista, ¿qué le dirían al público para que se anime acercarse el próximo 2 de agosto al estreno?

A.R: Para mí es una ilusión.  Después de mucho tiempo vuelvo actuar y encima tengo el privilegio de surfear al mismo tiempo. Otra cosa que se desconoce,  es que mi padre y mi hijo representan mi personaje en diferentes fases de mi vida y eso es un plus emotivo para mí.

B.G: Les diría que no es una gran producción, pero que hemos puesto mucha ilusión en ello y que sólo por eso nos encantaría que compartieran ese ratito con nosotros el día del estreno.

Un adelanto de The Shaper